ROMA — Un juez ordenó a una universidad italiana que pague 4.000 euros (4.290 dólares) a un prestigioso académico luego de despedirlo, una acción que, según él, fue provocada por su carrera anterior como actor para adultos.
El profesor Ruggero Freddi actuó en el porno gay en los EE. UU. como Carlo Masi entre 2004 y 2013 para Colt Studios, y luego recibió títulos avanzados en ingeniería y matemáticas. Un tribunal civil de Roma le impuso 2.500 euros por horas no pagadas y 1.500 euros por “despido injustificado”.
El resultado fue publicado la semana pasada por medios italianos. Feria de la vanidad otro La República.
En 2019, después de dos años de docencia en la Facultad de Ingeniería de la Universidad Sapienza de Roma, Freddi fue despedido sin motivo. La universidad también retuvo el pago que le correspondía en ese momento.
“Me vi obligado a demandar”, dijo a la edición italiana de Vanity Fair. “Y gané. Espero que mi caso les dé valor a todos los doctorandos que son explotados, después de años de estudios y especializaciones”.
Freddi, quien actualmente trabaja como analista de datos, dijo a la publicación que si bien no tiene pruebas concretas, tiene “un sentimiento muy claro y cada vez más fuerte” de que su pasado en el porno gay jugó un papel crucial en el despido.
“Es solo mi opinión”, señaló. “Pero sentí que había prejuicios a mi alrededor, que estaban más allá de mi capacidad como maestra”.
La multa adicional adjunta a la sentencia parece indicar que el juez estuvo de acuerdo con Freddi en que se había producido un acto de discriminación injustificada.
Freddi, quien también fue noticia en 2018 cuando se casó con un compañero actor adulto a quien conoció en el set, ha hablado abiertamente sobre su pasado porno. como rosa noticias reportadole dijo a Times Higher Education en 2018 que dejó una carrera exitosa en la adultez porque quería crecer.
“Y como no podía crecer más en la industria del porno, decidí que era hora de hacer algo completamente nuevo”, explicó. “La verdad es que me volví demasiado rico y famoso para seguir interesado en ese trabajo.
“De la industria del porno, aprendí la importancia de la autopromoción”, agregó Freddi. “Tienes que hacerle saber al mundo lo increíble que eres porque nadie vendrá a buscarlo para descubrirlo por sí mismo”.
La galardonada intérprete italiana Valentina Nappi le dijo a Noticias porno que “el caso de Ruggero Freddi destaca los límites inherentes de la idea ‘liberal’ de que es posible una coexistencia constructiva y fructífera entre puntos de vista racionales y aquellos que dejan lugar a la irracionalidad. Esto no es más que una ilusión. Si queremos un mundo en el que las expresiones de racionalidad, como poder enseñar cálculo después de una carrera en la pornografía, sean libres, todos los puestos de poder deben ser desocupados por aquellos que, aunque solo sea por presión social y/u oportunismo, son seguidores de la fe católica o de otros credos religiosos”.